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Mayo 2023
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Madre Tierra

Por H. P. Lovecraft

Vagando una noche bajé por el talud
de un hondo valle, húmedo y silente.
Su viciado aire exhalaba un vaho putrefacto
y un frío que me dejaba enfermo y débil.

Compactos árboles cerraban los costados
como un ejército espectral de trasgos,
y las ramas contra el cielo menguante
asumían formas que aterraban.
Sin saber por qué, seguí avanzando.

Parecía buscar algo perdido
alegría o esperanza,
pero pese a mis esfuerzos sólo hallé
los fantasmas de la desesperación.

Los taludes se estrechaban más y más.
Y privado de la luna y las estrellas,
quedé cautivo en la grieta rocosa,
tan antigua y honda que la piedra exudaba
algo arcaico y desconocido.
Explorando con mis manos intentaba rastrear
el rostro inasible de aquel valle,
hasta que cubierto por el musgo encontré, un perfil pavoroso.
Nada que mis ojos cansados
puediesen reconocer.

Aquello hablaba de un tiempo remoto
para el paso efímero del hombre.
Los líquenes colgantes, húmedos y envejecidos,
me impedían leer la antigua historia.
El agua oculta, goteando quedamente,
Murmuraba cosas que no debía saber.

¡...mortal, efímero y osado,
guarda para ti lo que cuento,
piensa en lo que ha sido,
y en las escenas que han visto
estas piedras derrumbadas.
En consciencias ancestrales, anteriores
a tus débiles ancestros,
y en criaturas que todavía respiran
aunque no parezcan vivas a los ojos humanos.
Yo soy la voz de la Madre Tierra,
de la que nacen todos los horrores...!

Mother Earth
H. P. Lovecraft (1890-1937)

One night I wander’d down the bank
Of a deep valley, hush’d and dank,
Whose stagnant air possess’d a taint
And chill that made me sick and faint.

The frequent trees on ev’ry hand
Loom’d like a ghastly goblin band,
And branches ‘gainst the narrowing sky
Took shapes I fear’d—I knew not why.
Deeper I plung’d, and seem’d to grope
For some lost thing as joy or hope,

Yet found, for all my searchings there,
Naught save the phantoms of despair.
The walls contracted as I went
Still farther in my mad descent,
Till soon, of moon and stars bereft,
I crouch’d within a rocky cleft
So deep and ancient that the stone
Breath’d things primordial and unknown.
My hands, exploring, strove to trace
The features of the valley’s face,

When midst the gloom they seem’d to find
An outline frightful to my mind.
Not any shape my straining eyes,
Could they have seen, might recognize;
For what I touch’d bespoke a day
Too old for man’s fugacious sway.
The clinging lichens moist and hoary
Forbade me read the antique story;
But hidden water, trickling low,
Whisper’d the tales I should not know.

“Mortal, ephemeral and bold,
In mercy keep what I have told,
Yet think sometimes of what hath been,
And sights these crumbling rocks have seen;
Of sentience old ere thy weak brook
Appear’d in lesser magnitude,
And living things that yet servive,
Tho’ not to human ken alive.
I am the voice of mother earth,
from whence all horrors have their birth.”

El Extraño Mundo de H. P. Lovecraft

[SEPA] Howard Phillips Lovecraft (1890-1937), ha reconocido tres grandes influencias literarias que se corresponden, según los estudiosos, a tres etapas en su desarrollo como escritor. La etapa gótica que comprende escritos macabros que fueron creados entre 1905 y 1920 y que es el período influenciado por Edgar Allan Poe (1809-1849). La etapa onírica, en la que escribe sus pesadillas con un alto contenido simbólico entre 1920 y 1927 y que es la etapa influenciada por Lord Dunsany (1878-1957). La etapa de Cthulhu cuando desarrolla los mitos de Cthulhu desde 1927 hasta su muerte, en la que recrea un universo fantástico y oscuro impregnado de horror cósmico y que es la etapa tributaria del gran escritor galés Arthur Machen (1863-1947).

A pesar de haber nacido después que sus tres referentes literarios, murió cuando apenas tenía 47 años y sin que lograra en vida el reconocimiento de su talento literario. Siempre había vivido de manera estrecha como un escritor modesto a quien en ocasiones le publicaban sus cuentos las revistas de pulp fiction como Weird Tales y cuando las urgencias económicas ceñían su cinturón, trabajaba como escritor fantasma.


Manuscrito del Lovecraft “Las Montañas de la Locura”

Por lo general fue ignorado en su época y considerado peyorativamente un escritor popular de aquellos que se leen en las salas de espera o en los subtes, por escribir para revistas populares; incluso cosechó casi el desprecio de escritores como los argentinos Julio Cortázar (1914-1984) y Jorge Luis Borges (1989-1986) quienes lo consideraron, equivocadamente, un pálido imitador de Edgar Allan Poe. Sin embargo, Borges reconoce sentimientos encontrados frente a lovecraft que no pudo disimular, una tensión interior que lo llevó a escribir en el epílogo de El libro de arena, la siguiente glosa: El destino que, según es fama, es inescrutable, no me dejó en paz hasta que perpetré un cuento póstumo de Lovecraft, escritor que siempre he juzgado un parodista involuntario de Poe. Acabé por ceder; el lamentable fruto se titula ‘There Are More Things’, un cuento dedicado de manera explícita a la memoria de Lovecraft.”

¿Qué dice Wikipedia?


Arthur Machen


Lord Dunsany


Edgar Allan Poe

Un extraño homenaje, ocuparse de un pequeño escritor que a su criterio no merecía mayor atención y dedicarle un cuento.

Lovecraft murió sin creer que era un gran escritor y nunca llegó a proyectar o imaginar la enorme influencia que llegaría a tener su obra en la posteridad. Sólo escribía movido por un impulso interior y lo continuaba haciendo aunque la paga de sus contribuciones no siempre era suficiente o estuviera ausente. Sin embargo, un breve círculo de escritores lo respetaba y contribuyeron con varias creaciones a completar el universo fantasmagórico y paralelo en el que viven los extraños monstruos creados por Lovecraft. Era un pequeño grupo de amigos que se comunicaba con Lovecraft mayormente por correspondencia y se lo conoce como El Círculo Lovecraft. En las muchas cartas que intercambiaron puede apreciarse cómo el mismo Lovecraft los animaba a continuar desarrollando ese universo paralelo.

Para Robert Bloch (1917-1994), Augusth Derleth (1909-1971), Robert E. Howard (1906-1936), Henry Kuttner (1915-1958), Clarck Ashton Smith (1893-1961), Donald Wamdrei (1908-1987) y Frank Belknap Long (1901-1994); Lovecraft era un escritor de culto y formaron el conocido Círculo Lovecraft.

Suele creerse que Lovecraft vivió de manera solitaria y recluida; lo cual no es cierto. Amén de la correspondencia que tenía con sus amigos escritores del Círculo (el más nutrido intercambio epistolar entre escritores en el siglo XX), los visitaba con frecuencia. A pesar de que, para los estándares de su época era un desempleado crónico que eventualmente recibía una paga por alguna publicación, fue capaz de viajar gracias a que ellos lo recibían en sus casas. Pero también fue extremadamente generoso desde el punto de vista intelectual al corregir los trabajos que le enviaban. Lovecraft invitó a sus amigos del Círculo participar en sus Mitos de Cthulhu y les dio total libertad para tratarlos como mejor les pareciera.

Leer a Lovecraft es una experiencia que trasciende la literatura, pues transmite la idea de que la Humanidad se encuentra acechada por seres pretéritos, que son los primigenios señores de la Tierra que fueron encadenados en las cuencas abisales del planeta y que acechan desde el abismo esperando la oportunidad de liberarse de su cautiverio. Ciego a las culpas, al bien y al mal, el universo deja a su suerte el destino de la humanidad cuyo futuro depende del azar cósmico. Cultos ancestrales de humanos corrompidos veneran a los cautivos y trabajan para su liberación. Por los intersticios de la realidad cotidiana, prosaica y vulgar, a veces se filtran pequeños fragmentos de una dimensión amenazante, que algunos pretenden evitar y que otros quieren desencadenar en una lucha constante que se acerca a su fin. En este orden, el Círculo Lovecraft, fue o es, algo más que un club de escritores.

 

 

 

 

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